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Cultura
Breguet Classique 7137: Lección de habilidad relojera
Luis Peyrelongue . 22, jul, 2022
El Breguet Classique 7137 encierra conocimientos históricos y códigos genéticos relojeros que se fueron desarrollando exitosamente desde hace más de 200 años, añadiendo a ellos el complejo arte del guilloché al servicio de la legibilidad y la belleza. El guilloché es un grabado con un patrón de diseño repetitivo y complejo hecho con gran precisión y detalle. Esta suma de detalles estéticos tan típicos de Breguet, a los que se agregan las innovaciones mecánicas, son la manifestación del arte, inventiva y creatividad de Abraham-Louis Breguet, el afamado relojero francés del siglo XVIII que tantos aportaciones hizo a la horología. Pero comencemos con el apartado estético del 7137.
La caja redonda del reloj mide 39 mm de diámetro y 8.65 mm de grosor. Está fabricada en oro blanco de 18 quilates. Su bisel, delgado y acanalado, y las asas redondeadas y soldadas, lo hace muy portable. El fondo es de cristal de zafiro y hermético hasta 30 metros.
La caja porta una hermosa carátula de color azul Breguet, hecha en oro de 18 quilates y grabada a guilloché a mano. La circunferencia de las horas integra números romanos. La indicación de las fases y edad de la luna está ubicada a las 2.
Las nubes grabadas que bordean el cielo lacado de la fase de la luna, se acompaña de un escarchado que evoca la Vía Láctea.
La indicación de la fecha está a las 6, mientras que la indicación de la reserva de marcha va a las 10 horas. La carrera del 7137 es de piel de aligátor azul con hebilla desplegable de oro blanco.
La carátula del reloj es muy elegante, magistral y finamente concebida, decorada usando máquinas manuales que solo pueden ser usadas por expertos grabadores. En la esfera se pueden ver diversos estilos que funcionan de maravilla en conjunto. Además, las manecillas
Breguet estilo à pomme évidée
en acero azulado se coordinan con el dial plateado y grabado, concediéndole una extrema visibilidad a los numerales romanos. Sin exagerar, las carátulas de los Breguet Classique se ejecutan mediante la misma técnica que originalmente se desarrolló para algunos de los mejores relojes Breguet de bolsillo del mundo, fabricados hace más de 200 años.
Un gran Breguet
El movimiento mecánico extraplano de carga automática del 7137 es el calibre 502.3 DR1 de 256 componentes, numerado y firmado y con volante Breguet con espiral de silicio que late a 3 hercios. La reserva de marcha de 45 horas es soportada por una masa oscilante de oro de 18 quilates, acabada también en guilloché. Maximizando el efecto estético, el calibre se ha muy decorado con Côtes de Genève.
Es tan singular la construcción de cada reloj Breguet Classique que, fiel a su tradición, nacida a finales del siglo XVIII, la Maison inscribe sobre la carátula el número individual del reloj y graba una firma secreta. Estos mismos números que se pueden ver en la superficie del rotor y forman parte de un sistema que Breguet utiliza para garantizar que el reloj permanezca inalterado en el futuro, ya que los números de las diversas piezas deben coincidir.
El aspecto general de un reloj como el
Breguet Classique 7137
es uno que simplemente rezuma refinamiento y clase, pero también interés visual e historia. Este es un reloj de vestir de pieza de conversación seria.
Los marcatiempos Breguet pueden ser extremadamente complejos, como sus calendarios perpetuos, tourbillones o repetidores de minutos, pero el
7137 es uno donde la mayoría de lo
s amantes de los relojes Breguet encuentran gran placer.
Los invitamos a que nos honre con su visita en
Chronos Peyrelongue
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