Zenith: este es el nuevo Defy Skyline Chronograph

Presentado en 2021, el Zenith Defy Skyline se ha establecido como una importante subcolección para la marca. Enarbolando los atributos históricos y estilísticos más relevantes de la serie Defy, la gama ha florecido hasta abarcar más de 20 referencias, que van desde el intrépido solotiempos —con su segundero pequeño relampagueante— hasta creaciones de la más alta relojería que incluyen relojes esqueletizados y con tourbillon.

Defy Skyline es una propuesta que trae al mundo de hoy la audaz idea del Zenith Defy A3642 de 1969, un reloj con una osada caja octogonal, inéditos colores en la esfera, un sistema de amortiguación del movimiento para protegerlo de los golpes, una notable resistencia al agua y, en algunas referencias, un movimiento de alta frecuencia. Aquel reloj y su matemático estilo precede muchas de las grandes obras relojeras surgidas en los setentas, lo que lo convierte en un genuino protagonista de la transformación de la relojería de lujo. Con esa idea en mente y con un nuevo empuje tecnológico, llegó Defy Skyline a las muñecas de los coleccionistas en 2021.

A partir de la variante original solotiempo de 41 mm presentada hace tres años, se han integrado referencias en tamaños diversos que aluden a los inicios del reloj Zenith Defy de hace medio siglo. Empero, no es sino hasta hoy que una versión con movimiento cronógrafo El Primero se suma a la familia.

En efecto, la marca redondea la cosmopolita colección Defy Skyline presentando un trío de cronógrafos diseñados para cautivar a los aficionados que aprecian la perfecta combinación de influencias vintage y el lenguaje de diseño ultramoderno de la colección. Y a ello se suma la máxima rúbrica de la marca: el legendario calibre El Primero.

El nuevo Zenith Defy Skyline Chronograph luce su infaltable caja octogonal facetada de acero inoxidable de 42 mm con acabados cepillado y pulido y el característico bisel dodecagonal. La corona atornillada lleva el logotipo de Zenith en forma de estrella, y los pulsadores del cronógrafo, de forma rectangular, se alinean con el diseño geométrico de la pieza. El fondo transparente al reverso de la caja deja entrever la mecánica El Primero con su prominente masa oscilante calada en forma de estrella de cinco puntas. Una correcta resistencia al agua de 100 metros redondea la oferta y nos recuerda otro de los valores funcionales de los relojes Zenith Defy originales.

El nuevo Defy Skyline Chronograph se presenta con carátulas en negro metálico, azul o plata. Cada una de ellas está adornada con el característico patrón grabado de estrellas. La disposición familiar de la esfera presenta registros subsidiarios empotrados con acabado caracolado y ligeramente superpuestos, obedeciendo el esquema que propone el calibre cronógrafo El Primero 3600: segundero permanente a las 9, contador de 60 segundos a las 3 y registro de 60 minutos a las 6. Un pequeño fechador —en el color de la carátula— se asoma en la posición de las 4:30.

El reborde exterior, también con 12 facetas para hacer eco de la forma del bisel, muestra la escala de 1/10 de segundo para la manecilla central del cronógrafo, adornada con un contra-peso en forma de estrella que completa una vuelta en 10 segundos. Las agujas del cronógrafo se distinguen por sus puntas rojas, mientras que las manecillas centrales facetadas de las horas y los minutos están chapadas en rutenio y recubiertas de Super-LumiNova SLN C1 para mejorar su visibilidad con poca luz.

Como se mencionó, el Zenith Defy Skyline Chronograph está impulsado por el calibre El Primero 3600, introducido en 2019. Con un tren de engranajes optimizado y un escape con rueda y palanca de silicio, este movimiento automático ofrece una notable fiabilidad a la que se suma una reserva de marcha de 60 horas. Aprovechando la alta frecuencia de 5 Hz (36,000 alternancias por hora) del movimiento, el reloj muestra su capacidad para mostrar 1/10 de segundo con una claridad estupenda.

El Zenith Defy Skyline Chronograph se presenta con un brazalete de acero inoxidable complementado con una correa de caucho con estampado de estrellas y una hebilla desplegable de acero. Un sello distintivo de la serie Defy Skyline, el mecanismo integrado de cambio rápido de correa permite una versatilidad sin esfuerzo y sin necesidad de herramientas. Con sólo pulsar un botón, el brazalete de acero de tres eslabones puede sustituirse fácilmente por la correa de caucho con hebilla desplegable de acero.

El Zenith Defy Skyline en todas sus modalidades —y ahora con el nuevo cronógrafo— honra las ideas del Defy original de 1969 y las reinventa para recordarnos el prodigioso arrojo y afán innovador de aquel reloj «neo deportivo». Asimismo, mantiene la perspectiva audaz y propositiva del Defy y hoy la ensalza con las tres nuevas referencias con calibre cronógrafo El Primero. Así, Defy Skyline se confirma como el principal exponente del espíritu innovador y desenfadado que siempre ha mostrado la casa de Le Locle.